Mi mundo de fantasía

Rondaba el año 88 cuando una de las personas más importantantes de mi vida me contó una historia de un gnomo que él conocía, un gnomo que vivía en el monte y era amigo de mi perro, un gnomo que le preguntaba por mí cada vez que le veía, un gnomo al que nunca ví pero que llenó mis noches de sueños y de fantasía... desde aquel día vivo en el pais de nunca jamás, dejé de crecer y me nacieron unas alas.
Con el paso del tiempo aprendí a hacer magia en sueños, sólo tengo que desear algo con mucha fuerza, un poco de polvo de hada y... SE CUMPLIÓ!!!
GRACIAS a todos los que me recuerdan cuando estoy triste, que mi sonrisa hace magia, que no pierda mis alas y siga volando tan alto como hasta ahora, GRACIAS a todos los que creen en mi, a los que no me dejan salir de mi mundo de fantasía recordandome que cada lágrima que derramo es un hada que pierde sus alas.
GRACIAS a ti, porque el otro día me recordaste que el gnomo sigue preguntando por mi...